Movilidad en Familia.

Ir en bicicleta con niños no es ciertamente algo trivial. Hay varios factores que hacen que haya muchas opciones a tener en cuenta. Seguramente los dos más importantes son la edad del niño por un lado, y por el otro el tipo de ciclismo que se quiera hacer con ellos (paseo, ruta de día, viaje de varios días). Otros factores importantes también a tener en cuenta serían el precio de la solución elegida o bien el espacio del que disponemos para guardar o trasladar la solución que creamos más conveniente. También es importante el tiempo de uso o amortización que puede tener cada solución. Una solución cara, que la podamos usar durante mucho tiempo, no termina siendo tanto cara como dos o tres de baratas, que tengamos que ir adaptando cada año por ejemplo. Con todo esto en mente, haremos a continuación una lista de los elementos que conocemos y que hemos probado, explicando sus pros y sus contras.

- Sillitas de niño o bebé

Es seguramente lo primero que nos viene a la cabeza cuando pensamos en llevar niños con la bici. Las podríamos dividir en dos tipos principales. Las que se ponen delante, en la tija del manillar, y las que van detrás, que se suelen sujetar o bien al tubo del cuadro de la tija del sillín o directamente encima del portabultos trasero de la bici.

Las delanteras están pensadas para los niños más pequeños de hasta unos 15 kilos (aunque a nivel práctico seguramente no llegaremos a este peso ya que dominan mucho entonces la dirección y la maniobrabilidad). Las traseras suelen ser recomendadas hasta los 22/23 kilos o algún modelo incluso algo más para llevar niños ya mayores (35 kilos en la Polisport Guppy Junior por ejemplo). Las traseras implican llevar un portabultos preparado para llevar esta capacidad de carga. No tener un portabultos resistente puede implicar que este acabe cediendo con el peso y más si se llevan otras cosas como alforjas por ejemplo.

En el caso de bicicletas plegables con ruedas de 20" se debe usar un portabultos elevado como el Biologic Portage evitando así que los pies del niño toquen al adulto cuando este pedalea.

Con estos pesos recomendados, en la práctica estamos hablando de que podemos llevar niños desde 1 año a unos 4/5 aproximadamente (6/7 en sillitas como la Polisport Junior, y hasta 2/3 de las sillitas de delante). Eso si, nuestra recomendación es usar las sillitas sólo para desplazamientos urbanos de corta distancia y duración, por terrenos relativamente llanos y asequibles. Para hacer bicicleta de montaña o rutas de varias horas o días, creemos que no es la mejor opción para los niños, por la incomodidad en caso de que se duerman, por la poca movilidad que tienen, por la desprotección en caso de lluvia, o polvo o piedras que salten del camino, etc.

- Remolques

Son una opción muy buena tanto para desplazamientos urbanos como para rutas más largas de día o de varios días o salidas de montaña. Están pensados para niños de 1 a 3 o 4 o incluso 5 años.

Hay muchos modelos y marcas disponibles y en función del uso que les queramos dar tenemos que ir a los más sencillos o a los más técnicos. No es lo mismo un desplazamiento urbano que una ruta de montaña o un viaje de varios días donde el niño debe estar más horas dentro y más cómodamente. Elementos a tener en cuenta a la hora de mirar un modelo u otro, son el peso, la capacidad de carga, si es de uno o dos plazas, la ventilación que tenga, la protección frente la lluvia o el polvo o los insectos, el tamaño de plegado, si lleva suspensión o no; o las opciones que pueda tener a nivel de convertirlo en cochecito o en carro para ir a correr.

A nivel legal hay que saber la normativa urbana y el código de circulación que afecte a este tipo de vehículos en la zona dónde lo vamos a usar.

Para rutas de cicloturismo de varios días creemos que son la mejor opción para niños de 1 a 4 años. Ofrecen más protección, más comodidad, más capacidad de carga y más seguridad frente a cualquier otra opción. Si se quieren hacer rutas tipo vía verde también son seguramente la mejor opción. Si los niños duermen, es como suelen ir más cómodos y se puede aprovechar entonces para hacer más kilómetros y más tranquilamente.

A pesar de ser una opción que puede llegar a ser cara, una vez ya no se usan la venta de segunda mano suele ser fácil y rápida, recuperando parte de la inversión realizada, ya que el estado de los mismos suele ser bastante correcto incluso con un uso intensivo.

Fabricantes con los que trabajamos son XLS o Burley.

- Elementos de conversión tipo tándem

Son elementos que se montan en la bicicleta del adulto y permiten enganchar temporalmente una bicicleta de niño y arrastrarla, formando así como un tándem. Son prácticos si se hacen rutas de día largas o de varios días, en el momento en que el niño ya está cansado o bien en caso de desniveles pronunciados. También en caso de desplazamientos urbanos en que queramos tener el control total de la bicicleta del niño. Su uso implica que el niño ya pedalea y sabe ir con su bicicleta de pedales. Son recomendables para niños de 3 a 6 o 7 años, que ya van perfectamente en bicicleta.

Hacer largas distancias con este dispositivo no suele ser la mejor opción, ya que los niños pueden aburrirse más fácilmente y no pueden por ejemplo dormir en caso de que lo necesiten.

Son ejemplos el Trail-Angel o FollowMe o la goma remolcadora Tow-Whee. El primero más económico pero seguramente mucho menos estable que el segundo.

- Bicicletas de niño

Por un lado hay las bicicletas para los más pequeños, para los niños de 1 a 3 años aproximadamente. Son bicicletas sin pedales o también triciclos que facilitan el aprendizaje del sentido del equilibrio y la dirección. Son bicicletas para cortos recorridos o bicicletas que se pueden llevar guardadas por ejemplo en un remolque para cuando se para, el niño pueda hacer unas vueltas y estirar las piernas. Podéis ver una buena diversidad en www.petitbike.com

Luego, a partir de los 3 años y en adelante ya están las clásicas bicicletas de pedales. Las primeras suelen ser sin velocidades y a partir de los 5 o 6 años ya suelen llevar. Para hacer rutas largas ya aconsejamos que se lleven marchas. Para desplazamientos urbanos o de corta duración o en combinación con elementos de conversión tipo tándem, no haría falta.

- Tándems

Esta es una solución ideal sobre todo para llevar niños con problemas de movilidad por un lado, y por otro para hacer largas rutas cicloturísticas de varios días con alforjas. Permiten ser usados por niños a partir de 3 o 4 años y luego sin limitación de edad, ya que también están pensados para dos adultos.

Por un lado están los tándems tradicionales pero que deben tener unas dimensiones reducidas para que un niño pueda ir. Nosotros aconsejamos el Helios de Circe. Y por otro lado están los tándems semi-reclinables, que permiten llevar un niño con mucha facilidad, que este ayude o no a la pedalada y que si está cansado, incluso puedadormir. Realmente son tándems muy motivadores para los más pequeños. Conocemos el Morpheus de Circe o el Hase Pino de Hasebikes.

La opción del tándem es la más recomendable para viajar con niños varios días, sin temor a que por cansancio, por mal tiempo o por desniveles pronunciados éstos deban sufrir más de la cuenta.

A pesar de ser la opción más cara de todas, pueden ser usados durante mucho más tiempo, o bien una vez ya no se usan la venta de segunda mano suele ser fácil y rápida, recuperando par de la inversión realizada. Siempre les recomendamos a familias que quieran hacer rutas en bici mientras los niños tienen de 4 a 15 años, o incluso más.

- Bicicletas específicas de carga para llevar niños

Pensadas para desplazamientos urbanos con toda la familia. Son bicicletas preparadas para llevar bastante peso y que permiten incluso algunos modelos llevar hasta 3 niños. Son ejemplo la Yuba Kombi, la nueva Boda-Boda también de Mundo, la Urbanbiba o la Workcycles FR8 o Workcycles GR8. Algunos modelos son más largos (longtails), otras tienen unas medidas más normales y otros son perfectos para llevar uno o dos niños y la carga que haga falta, con unas dimensiones 100%normales.

Las recomendamos como vehículos urbanos, como sustitución del coche en cualquier tipo de desplazamiento urbano.